Muchas veces me preguntan cómo lo hago para llegar a todo (y no morir en el intento). Y como siempre te digo, se trata de buena organización y planificación.
Evidentemente siempre hay imprevistos, pero si encima estás desorganizado el caos puede acabar con tu paciencia. Saber gestionar el tiempo es, sin lugar a dudas, una de las claves para optimizar tu rendimiento, y sentirte así más satisfecho con tu propio propósito. Vamos a ver cómo conseguirlo.
Encontrar este equilibrio entre el tiempo que debes dedicar a cada tarea diaria, y lo centrado y motivado que estés para hacerlo, mejorará tus rendimiento y evidentemente tus notas.
Consejos para optimizar tu tiempo
Se trata de cambiar de mentalidad e interiorizar este nuevo hábito para sustituir aquellas conductas que te roban tiempo (interrupciones, imprevistos, falta de concentración, indisciplina, …).
Comprobarás que al cabo de unos días, cuando lo tengas más pulido, calcularás inconscientemente el tiempo que puedes ahorrar de una actividad para dedicárselo a otra.
Una gestión eficaz y eficiente del tiempo requiere que planifiques tanto el estudio como el ocio. Es una forma de controlar el estrés y de no sentir que estás malgastando el tiempo por no estar estudiando (puedes encontrar más información en este post donde te hablo de hacer listas para saber en qué punto estás).
Sé realista sobre tu forma de estudiar, el grado de complejidad de la materia y el tiempo del que dispones. Siempre que queremos adoptar una nueva rutina de estudio, debes darte tiempo y ser paciente. Los resultados se consiguen a medio y largo plazo.
Clasifica las asignaturas en función de su dificultad. De esta manera, será suficiente que destines:
- 30 minutos a las asignaturas fáciles.
- 45 minutos a las de dificultad media.
- 60 minutos a las difíciles.
Toma buenos apuntes en clase, para que cuando llegues a casa sólo tengas que repasar y sería bueno que te hicieras calendario mensual para visualizar de manera sencilla todas las actividades del mes (exámenes, trabajos, conciertos, cumpleaños, …).
Pero de esto te hablaré en otro post porque tiene su truquillo.
Así, cuando se acerque un examen incluirás en la lista de cosas que hacer cada día, el tiempo extra de preparación necesario.
Y algo que es súper importante…. Mantén ordenado tu espacio de estudio, escribe notas como recordatorio, y céntrate en una sola cosa cada vez. Si estás haciendo matemáticas, trata de no pensar en la tarea que tienes debes hacer después.
Te sentirás más a gusto con lo que haces y así reducirás el tiempo previo que necesitas para ponerte a estudiar.
Como ves, ponerse a estudiar es relativamente fácil pero concentrarse no lo es tanto. Te animo a que empieces hoy mismo a poner en práctica los consejos que vemos en el blog, porque TÚ PUEDES LLEGAR MUY MUY LEJOS.
Yo pongo toda la carne en el asador, ahora sólo falta que tú quieras hacerlo mejor cada día.
¿Estás poniendo en práctica lo que vemos en el blog? ¿Te gustaría que hablara de algo que te impide avanzar en el estudio? Estoy encantada de poder ayudarte. Cuéntamelo en los comentarios de aquí abajo y juntos llegaremos lejos!
Un abrazo enorme 💚